Las especies de peces más comunes

Tener una mascota en nuestra casa es algo altamente recomendable, y no solo por la compañía que nos dan, sino porque se pueden convertir en un miembro más de nuestra familia. Y aunque pensemos que esto puede pasar solo con las mascotas más comunes como perros y gatos, lo cierto es que tener peces también puede convertirse en una de las mejores elecciones que podemos escoger.

Tener un acuario lleno de peces en nuestra propia casa puede ser una de las mejores cosas ya que llenará nuestro hogar de color, luz y alegría gracias a las especies de peces más comunes para nuestro acuario, como los gupis, los peces de colores o peces escala, entre otras muchas especies. Pero para que todo salga como esperamos, es necesario seguir una serie de cuidados generales y otros específicos para cada uno de nuestros peces.

Comida, higiene y espacio

Hay tres factores que son esenciales para el correcto cuidado de nuestros peces para que puedan vivir en nuestra pecera, y son mantenerlos alimentados en todo momento de manera correcta, limpiar nuestro acuario al menos dos veces al mes, y en tercer lugar, contar con el espacio suficiente para que nuestros peces puedan nadar cómodamente en el acuario.

 

Para mantener la correcta alimentación de nuestros peces, debemos saber y conocer a la perfección cuál es el tipo de alimento que debemos darle según su especie, aunque es cierto que hay comidas más o menos generales adaptadas a la mayoría de las especies de peces de acuario.

En cuanto a la higiene, es esencial cambiar el agua de la pecera de vez en cuando, al menos parcialmente, y mantenerla siempre depurada. De este modo el agua estará en condiciones óptimas no solo de higiene, sino también de oxigenación para que así nuestros peces puedan vivir cómodamente.

La comodidad es lo que nos lleva al tercer factor, el espacio, ya que nuestros peces deben tener el espacio suficiente en el que poder nadar con total libertad, ya que si no disponen de este espacio podrían sufrir de estrés, algo que puede resultar fatal para los peces.

Cómo mejorar una pecera de bola

El otro día os contaba que las peceras redondas son una autentica tortura para los Goldfish, ya que es una especie que crece mucho (supera los 15 cm de largo por lo que necesita un acuario de 40 litros para él solo); es sociable, vive en bancos de peces de unos 15 a 20 ejemplares, por lo que necesita estar en contacto con otro ejemplares y, finalmente, requiere un fondo con piedras y algas para rebuscar en él y encontrar su comida.

Prisiones para peces

Pero no sólo para el Goldfish, según el especialista Tirion Baarn las peceras redondas son una auténtica prisión para cualquier especie de pez debido a su reducido tamaño, que no suele superar los 10 o 15 litros, por lo que quitando especies que apenas crecen, el resto desarrollará enanismo y graves problemas de salud porque se atrofiarán sus órganos internos.

Otro de los problemas que provoca esta pecera son la concentración de deshechos en su interior porque no vienen con filtro para limpiar el agua (o traen uno pequeño de esponja o fondo de placa) ni traen bomba de aire, así que el agua acabará ensuciándose pudiendo provocar enfermedades. Habrá que limpiar el agua regularmente y añadir productos como anti-cloro, pero con cuidado de aplicar la medida exacta para que un mal parámetro del agua no le mate por asfixia o branquias abrasadas por el cloro.

Otros problemas físicos son la atrofia ya que nadan en círculos obligatoriamente, la asfixia debido a la constante falta de oxígeno que los obliga a boquear en la superficie y una temperatura inadecuada del agua que les perjudica ya que se calientan en exceso debido a su pequeño tamaño.

Los peces sufren más problemas psicológicos: el cambio constante del agua que, como veremos luego, exige que se saque al animal de la pecera les genera estrés; las paredes curvas distorsionan su percepción de la realidad y puede enloquecerlos; también caen en el aburrimiento y la depresión al carecer de adornos y compañeros.

Mejorar una pecera de bola

Lo más sensato sería reconocer el error y comprar un acuario, pero si no nos es posible, hay una serie de complementos que pueden mejorar la pecera de bola de manera temporal aumentando la calidad de vida de nuestros pececitos y, por lo tanto, que no se nos muera asfixiadito a los tres días. De todos modos, insisto: un goldfish u otra especie que crezca morirá irremediablemente: una lástima para todos los que, como tú, amamos los peces.

Complementos en la pecera

Como te hemos dicho, uno de los problemas de las peceras bola es que el animalito sufre a veces de carencia de oxígeno; por ello, no llenes la pecera de agua hasta los topes, sino deja unos centímetros debajo del cuello para facilitar el intercambio de gases. Si aún así el pececito boquea en la superficie, deberás comprar un difusor de burbujas conectado a una bomba de aire. Es barato, yo que tú lo compraba de todos modos sin esperar a comprobar que el animalito se asfixia.

Filtro de placa

Hay filtros circulares para peceras de bola. Son de plástico con rendijas y un tubo del mismo material. Antes de colocarlo enjuágalo con agua no clorada y ponlo en el fondo de la pecera. Conéctalo a una bomba de aire y cúbrelo con 4cm de grava para pecera. Llena la pecera de agua y enciéndelo. El aire succiona los desechos del pez hacia la grava donde son descompuestos. De esta manera se producirá la filtración biológica de la pecera mejorando la calidad del agua, aunque es necesario cambiar ésta una vez a la semana y otra al mes para que sea de mejor calidad.

Cambios de agua

Debes cambiar el agua semanalmente y una vez al mes. Los expertos recomiendan cambiar la mitad del agua de la pecera sustituyéndola por agua no clorada. Para hacerlo, deja reposar ésta durante un rato hasta que alcance la misma temperatura de la de la pecera. Cuando veas con un termómetro de acuario que es la misma saca una cuarta parte del agua en la que irá tu pececito y ponlo en un recipiente aparte. Remueve la grava, vacía el resto del agua, añade el agua no clorada y luego al pececito y el agua en la que está.

Estos son los consejos para solucionar temporalmente el problema pero si realmente quieres que tu pez, sea de la especie que sea, viva mucho tiempo y muy feliz, llena la pecera de bola de arena, conchas y úsala como objeto decorativo y compra un acuario adecuado para tu pececito. Así podrás añadir amigos para que no esté solo y tanto ellos como tú disfrutareis de la experiencia de compartir la vida con un precioso animal que aporta tantas satisfacciones.

Cuidados de peces de agua caliente

Tener un acuario en nuestra casa es algo que cada vez solemos tener con mucha más frecuencia gracias sobre todo a la gran cantidad de especies de peces que podemos tener en nuestro hogar. Tener uno o varios peces en nuestro acuario puede ser una gran experiencia ya que llenarán nuestra casa de vida, de color y nos harán compañía.
Pero como en todos los ámbitos de nuestra vida, para poder disfrutar de algo debemos trabajar para conseguirlo. en este caso, lo que debemos hacer es cuidar que nuestro acuario se encuentre siempre en el mejor estado, lo que incluye el cuidado de nuestros peces y también el cuidado del propio acuario.

En cuanto a los tipos de peces que podemos incluir en nuestro acuario, se encuentran los peces de agua dulce, los de agua salada, los de agua fria y los de agua cálida. Y son precisamente estos últimos, los peces de agua cálida, de los que hablaremos a continuación para conocer algunos de sus cuidados.

Más costoso pero mucho más colorido

Los peces de agua cálida tienen muchas particularidades que los diferencian del resto de los peces que podemos tener en nuestro acuario. Una de sus grandes particularidades es que estos peces presentan tonos mucho más vivos y coloridos que la mayoría de los peces de acuario de agua fría, por lo que dan más vida y alegría a nuestro hogar. Eso sí, los peces de agua caliente conllevan muchos más cuidados que los peces de agua fría, cuidados que en ocasiones suelen sermucho más costosos al necesitar de cosas mucho más específicas.

 

Por ejemplo, algunos de los cuidados esenciales que tienen que ener nuestros peces de agua cálida tienen que ver de manera directa con el acuario. Debemos equiparlo con los filtros correctos y con los sistemas térmicos adecuados para conseguir la temperatura óptima del agua para que nuestros peces puedan sobrevivir sin roblemas.

Además, a la hora de alimentar a neustros peces, es esencial que les proporcionamos una comida especial adecuada a su especie ya que no todos los peces se alimentan del mismo tipo de comida. Para obtener esta comida, podemos acudir a cualquier tienda especializada en animales y en peces, donde podrán informarnos del alimento que debemos dar a nuestro peces

¡A mi pez la acosa un guppy depravado!

Un pez baila una danza de apareamiento sensual frente a una hembra de Skiffia bilineata que lo mira con una mezcla de estupefacción y creciente atracción sexual. Aún así duda; se parece mucho a un macho de su especie pero no acaba de estar segura. Él se percata y baila con más ahínco. Ella se deja seducir, cede ante la danza hipnótica y.. era un guppy.
Según la perspectiva ésto puede ser el guión de una mala película porno o de una película de terror ya que la cópula con un pez guppy no es nada agradable para la hembra de otra especie sino una verdadera agresión sexual. Es lo que se deduce de una investigación realizada entre el Instituto de Ecología de la Universidad Nacional Autónoma de México y la Universidad Saint Andrews de Escocia. El problema es que el guppy presenta muchas similitudes morfológicas y de conducta con especies en peligro de extinción de la familia godeide, como la Skiffia bilineata.

El ritual de apareamiento es muy parecido: los machos bailan una danza de cortejo ante la hembra para que ésta permita que el esperma del macho fecunde los huevos pero si bien el ritual es similar, no así la cópula ya que en la bilineata, la transferencia de esperma se realiza cuando entran en contacto los poros genitales del macho y de la hembra, pero en los guppies, la transmisión de esperma se realiza a través de un órgano extensor e intromisor, que se llama gonopodio, que tiene unos ganchos que lastiman a la hembra, ya que su aparato reproductor no está preparado para ello.

 

Algunas hembras rechazan el cortejo pero el guppy es un macho insistente y muy sexual, el 80% de su vida lo emplean en cortejar o copular, así que la sigue acosando esperando su oportunidad. Éste es el motivo por el cual la introducción de esta especie tropical en las aguas de México está afectando a su ecosistema, aunque afortunadamente las hembras tienen espacio para huir de los acosadores, cosa que no ocurre en una pecera donde, tarde o temprano, el macho guppy conseguirá consumar la agresión.

Por eso debemos tener especial cuidado con este pez en acuarios a la hora de escoger las hembras que van a convivir con él ya que puede darse este problema y acabar lastimándolas. Asimismo deberemos tener hembras de su especie suficientes, casi el doble ya que si no tiene hembras suficientes acabara acosando a las que ya estén preñadas y las estresará gravemente.

Las especies de peces más comunes en nuestras peceras y algunos de sus cuidados

Tener una mascota en nuestra casa es algo altamente recomendable, y no solo por la compañía que nos dan, sino porque se pueden convertir en un miembro más de nuestra familia. Y aunque pensemos que esto puede pasar solo con las mascotas más comunes como perros y gatos, lo cierto es que tener peces también puede convertirse en una de las mejores elecciones que podemos escoger.

Tener un acuario lleno de peces en nuestra propia casa puede ser una de las mejores cosas ya que llenará nuestro hogar de color, luz y alegría gracias a las especies de peces más comunes para nuestro acuario, como los gupis, los peces de colores o peces escala, entre otras muchas especies. Pero para que todo salga como esperamos, es necesario seguir una serie de cuidados generales y otros específicos para cada uno de nuestros peces.

Comida, higiene y espacio

Hay tres factores que son esenciales para el correcto cuidado de nuestros peces para que puedan vivir en nuestra pecera, y son mantenerlos alimentados en todo momento de manera correcta, limpiar nuestro acuario al menos dos veces al mes, y en tercer lugar, contar con el espacio suficiente para que nuestros peces puedan nadar cómodamente en el acuario.

 

Para mantener la correcta alimentación de nuestros peces, debemos saber y conocer a la perfección cuál es el tipo de alimento que debemos darle según su especie, aunque es cierto que hay comidas más o menos generales adaptadas a la mayoría de las especies de peces de acuario.

En cuanto a la higiene, es esencial cambiar el agua de la pecera de vez en cuando, al menos parcialmente, y mantenerla siempre depurada. De este modo el agua estará en condiciones óptimas no solo de higiene, sino también de oxigenación para que así nuestros peces puedan vivir cómodamente.

La comodidad es lo que nos lleva al tercer factor, el espacio, ya que nuestros peces deben tener el espacio suficiente en el que poder nadar con total libertad, ya que si no disponen de este espacio podrían sufrir de estrés, algo que puede resultar fatal para los peces.

Los cinco peces más bellos del mundo

De acuerdo, este artículo es tan parcial y subjetivo como puede serlo, pero, ¿no es subjetiva la belleza? De ahí que no tengamos por qué coincidir en cuáles son los cinco peces más bellos del mundo, pero desde peceras.es nos han parecido que son estos:

5.- Ídolo moro

Caro y complicado de mantener en los acuarios domésticos, el ídolo moro es uno de los santos griales de los acuaristas. Eso sí, evitemos confundir a esta especie con otra mucho más común, como lo es el bannerfish o ídolo falso.

 

4.- Pez betta

El cuarto puesto es para el betta, también llamado luchador de Siam o Betta splendens. Nativo de la cuenca del Mekong (en el sureste asiático) es uno de los peces más populares de entre los de agua dulce. Una belleza por su color, sus formas y su elegancia. Eso sí, no juntes a dos de estos camorristas en el mismo espacio.

Los colores del betta se mueven entre el verde y el marrón embotado y las aletas de los ejemplares salvajes son relativamente cortas. Pero la selección artificial ha desarrollado ejemplares de largas aletas y colores muy llamativos.

3.- Caballito de mar

Con el cuerpo rodeado de anillos óseos y cola prensil, tiene un hocico de longitud media y una corona pequeña de cinco puntas. La gama de colores de estos animales –se hace extraño llamarlos peces, ¿verdad?- va del blanco al marrón oscuro, con una serie de bandas transversales en esos mismos tonos. Llegan a los 25 centímetros y suelen ser los machos los que incuban los huevos en su bolsa abdominal.

2.- Pez payaso

El que nos ha parecido digno de la medalla de plata es el pez payaso o pez anémona. Suelen presentar una coloración amarilla-naranja con rayas blancas y forro negro en torno a las aletas. Aunque, a decir verdad, la distribución de los colores, así como el tono exacto presenta muchas variaciones, según la subespecie. El tamaño de los adultos oscila de los diez a los dieciocho centímetros.

1.- Pez mandarín o gobio mandarín

He aquí un pez hipnótico: el Synchiropus splendidus, gobio mandarín o pez mandarín. Pequeño y de tonos brillantes, pertenece a la familia de los dragoncitos, muy popular en los acuarios marinos. La especie tiene su origen en el Pacífico, entre las Islas Ryukyu y el sur de Australia

El cuerpo del pez mandarín alcanza los seis centímetros y es alargado; tiene ojos saltones y dos aletas dorsales. En cuanto a los colores, con el azul de fondo, destacan las franjas anaranjadas, verdes y amarillas.

Ahora, te toca juzgar y elegir.